“Nos sentimos satisfechos por la condena que le dio la jueza al feminicida de nuestra hija; nos sentimos igual tristes porque sabemos que no nos la van a devolver, pero en nuestros corazones ya hay paz y tranquilidad al saber que se hizo justicia,” expresó Darío Amaya, padre de Blanca Amaya, después de que el Tribunal de Enjuiciamiento dictara una sentencia histórica en Quintana Roo.

La jueza Gabriela Carrillo, del Tribunal de Enjuiciamiento, sentenció a Efrén Canto a 37 años y seis meses de prisión por el feminicidio de Blanca Amaya, una joven madre de 26 años, en un caso que ha dejado huella en el estado. Blanca, cuya vida fue brutalmente arrebatada, deja atrás a cuatro hijos que ahora enfrentarán un futuro sin su madre. El veredicto representa un avance en la búsqueda de justicia en un país donde los feminicidios a menudo quedan sin resolver. Comunicación Viral ha dado seguimiento a este caso desde el inicio, documentando el largo y doloroso proceso de la familia Amaya en su lucha incansable por justicia.

Para Fabiola Amaya, prima de Blanca, esta sentencia es un rayo de esperanza. “Estamos muy agradecidos… Queremos agradecer infinitamente a todas las personas que nos ayudaron en este proceso de dos años de lucha… Sabemos que Blanca no regresa con esto, pero tendremos paz en nuestros corazones y tranquilidad en nuestras almas. Hoy celebramos esta condena,” afirmó conmovida. En su mensaje, también agradeció el apoyo de las colectivas Casa Colibrí, representada por Candy May Novelo, y Malinches Ingobernables, encabezada por Diana Miramontes, así como el respaldo de los medios de comunicación que hicieron eco de la lucha de la familia circense. 

Abogada del Caso Blanca Amaya pide que ningún recurso legal le quite la justicia obtenida 

La abogada Liz Lugo, quien encabezó la defensa de la familia, subrayó la importancia de la sentencia como un precedente crucial para el acceso a la justicia y el derecho a la verdad. “Hemos logrado la condena de 37 años y seis meses, así como una multa; además, estamos en proceso de obtener una indemnización por la reparación integral del daño,” explicó Lugo. Destacó que esta resolución representa un avance para combatir la violencia contra las mujeres, y envía un mensaje a quienes buscan minimizar la gravedad de estos crímenes.

A pesar del avance, Lugo advirtió que la defensa de Canto podría apelar la sentencia. Sin embargo, confía en la solidez de las pruebas y el trabajo exhaustivo realizado. “Consideramos plenamente que es una buena sentencia, y esperamos que si el señor Efrén apela, la justicia continúe, pues este ha sido un caso donde la familia tuvo que luchar incluso para que el feminicidio fuera reconocido como tal”. 

Agregó que este es uno de los casos más re victimizantes a los que se ha enfrentado ya que en primera instancia se quiso llevar como un “accidente de tránsito”, pero lograron la reclasificación a femicidio, aunque luego de ello la defensa de Efrén buscó señalarlo como un suicidio, cuando la defensa logró comprobar el dolo que existió.

En su declaración, Darío Amaya, quién por primera vez realizó una declaración tras la trágica muerte de su hija, reconoció la labor de la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo y su titular, Raciel López y a la maestra Estela Labastida por el papel que desempeñaron en el proceso. A lo largo de este doloroso camino, la familia Amaya ha contado con el respaldo de diversas colectivas y personas de todo el país que exigieron justicia y que, con su acompañamiento, hicieron posible la sentencia en memoria de Blanca.